Un futuro mejor en la lucha contra el hambre oculta: Cómo se desarrolló nuestra nueva forma seca de vitamina A para combatir la malnutrición

Resumen

• La carencia de vitamina A afecta a millones de personas en todo el mundo, contribuye al hambre oculta e impide el crecimiento y el desarrollo.
• Dry Vitamin A Palmitate NI ofrece una mayor estabilidad, una formulación de etiquetado limpio y una solución más sostenible para hacer frente a los principales retos del enriquecimiento de los alimentos. La innovadora solución de dsm-firmenich tiene como objetivo reducir la carencia mundial de nutrientes y apoyar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 de las Naciones Unidas: Hambre Cero.

La inseguridad alimentaria mundial ha aumentado hasta afectar a un 28,9% de la población, con aproximadamente 2.330 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria moderada o grave. ¹ Además, se calcula que 5.000 millones de personas padecen hambre oculta, una forma de malnutrición causada por la carencia de micronutrientes.¹ Entre los micronutrientes esenciales que suelen faltar en las dietas de quienes padecen hambre oculta, la vitamina A destaca por su papel fundamental en el crecimiento, la función inmunitaria y la visión.²

Según la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente 190 millones de niños en edad preescolar (un tercio de los menores de cinco años) y 19 millones de mujeres embarazadas de los países en desarrollo sufren carencia de vitamina A.³ La carencia de vitamina A no sólo deja a las poblaciones con sistemas inmunitarios debilitados y vulnerables a las enfermedades, sino que también es una de las principales causas de ceguera infantil evitable.⁴

Con este telón de fondo, nos embarcamos en una misión para marcar la diferencia. Tras dos años y medio de intensa investigación y desarrollo, dsm-firmenich ha presentado una nueva forma de vitamina A seca para combatir la desnutrición. El palmitato seco de vitamina A NI es una solución estable y de etiquetado limpio para combatir la carencia generalizada de nutrientes mediante el enriquecimiento de la harina -uno de los alimentos básicos más consumidos en todo el mundo- para proporcionar una poderosa herramienta en la lucha contra el hambre oculta.

Fortificar la harina para aportar nutrientes a través de los alimentos básicos

La harina de trigo es algo más que un alimento básico: es una piedra angular de la nutrición mundial. La harina, que aporta el 20% de las calorías consumidas en el mundo y hasta el 50% en algunas regiones, es parte integrante de la vida cotidiana de miles de millones de personas.⁴ Los alimentos a base de harina atraviesan fronteras culturales y divisiones económicas, abarcando desde las tostadas matinales en los hogares europeos hasta los chapatis en el sur de Asia. La ubicuidad de los productos de harina los convierte en un vehículo ideal para abordar las carencias de micronutrientes. Al enriquecer la harina con nutrientes esenciales como la vitamina A, podemos aprovechar las pautas de consumo de alimentos existentes para proporcionar una nutrición vital a quienes más la necesitan. Se trata de una estrategia que no requiere cambios en los hábitos alimentarios ni en el comportamiento de los consumidores: los nutrientes se suministran a través de alimentos que la gente ya consume a diario.

Además, con 93 países que ordenan el enriquecimiento de la harina de trigo, existe una infraestructura mundial establecida y preparada para aplicar soluciones de enriquecimiento nuevas y más eficaces.⁵ La aceptación generalizada del enriquecimiento de la harina ofrece una oportunidad única para lograr un impacto significativo en la nutrición mundial de forma relativamente eficaz.

Superar los retos de la fortificación

La vitamina A, la más inestable de todas las vitaminas a la hora de ser procesada, ha planteado importantes obstáculos en los esfuerzos de enriquecimiento de los alimentos. Los procesos de molturación tradicionales, aunque eficaces para producir alimentos básicos, a menudo despojan a los cereales de sus nutrientes naturales.

Dry Vitamin A Palmitate NI de dsm-firmenich aborda estos retos de frente. Su mayor estabilidad garantiza que la vitamina A siga siendo potente durante todo el proceso de producción y almacenamiento de los alimentos, un factor crítico para garantizar que los alimentos enriquecidos aporten los beneficios nutricionales previstos. La fórmula de etiquetado limpio, sin BHA ni BHT, también responde a la creciente demanda de los consumidores de productos alimentarios más naturales.

Y lo que es más importante, el pequeño tamaño de las partículas del ingrediente -con un mínimo del 90% que pasa a través de un tamiz de 250μm- garantiza una integración eficaz y uniforme en la harina, lo que significa que cada bocado de alimento enriquecido puede proporcionar una dosis constante de vitamina A para maximizar su impacto nutricional.

Una solución para hoy

El lanzamiento de Dry Vitamin A Palmitate NI llega en un momento crítico. La inseguridad alimentaria mundial ha aumentado en los últimos años debido a factores como el cambio climático, los conflictos y la necesidad permanente de promover el crecimiento saludable de los niños y ayudar a combatir las infecciones.⁵

En este contexto, las innovaciones en el enriquecimiento de los alimentos ofrecen un rayo de esperanza en la lucha contra la malnutrición, con beneficios a corto y largo plazo. Al mejorar el acceso a los nutrientes esenciales a escala mundial, esta nueva forma de vitamina A seca representa un paso significativo hacia la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 de las Naciones Unidas -Hambre Cero- y, por tanto, se alinea con nuestra ambiciosa misión de reducir la carencia de nutrientes para 800 millones de personas de aquí a 2030.

La experiencia científica, las alianzas estratégicas y el compromiso con la salud mundial crean el cambio

El éxito de iniciativas como Dry Vitamin A Palmitate NI depende no sólo de sus méritos técnicos, sino también de su integración en estrategias de intervención nutricional globales y multisectoriales. Nuestra larga colaboración con el Programa Mundial de Alimentos, que actualmente llega a 35 millones de personas en 16 países al año a través de productos mejorados desde el punto de vista nutricional, proporciona una base sólida para la aplicación generalizada de esta nueva tecnología.⁶

Innovaciones como Dry Vitamin A Palmitate NI son un testimonio de lo que puede lograrse cuando convergen los conocimientos científicos, las asociaciones estratégicas y el compromiso con la salud mundial. En la lucha constante contra el hambre oculta, este nuevo ingrediente demuestra un avance tangible hacia un mundo en el que las carencias nutricionales sean cosa del pasado.