"Es importante que compartamos nuestros conocimientos, intercambiando ideas y siendo abiertos. Nadie tiene la verdad. Al igual que el mundo de la moda, la perfumería se rediseña, se reescribe y marca tendencias constantemente".
El espíritu de Grasse corre por la sangre de Fabrice. Su padre era perfumista, su abuela recolectora de jazmines y su abuelo proveedor de naturales. Sigue conectado al paisaje - olivos y cipreses, amplios espacios abiertos, el sol, el canto de las cigarras - y a su comunidad. "Los habitantes de Grasse mantienen sus conocimientos preciosamente ocultos, pero cuando los divulgan, los entregan por completo".
Fabrice aprendió de profesionales experimentados, prestando mucha atención a lo largo del viaje de cada ingrediente, desde la cosecha hasta el perfume. Creador por instinto, lleva más de 15 años dedicado al desarrollo de productos naturales, repartiendo su tiempo entre París y los laboratorios de investigación de Grasse.
Fabrice es un profesor generoso, empeñado en que sus conocimientos se transmitan de generación en generación. "Es importante que compartamos nuestros conocimientos, intercambiando ideas y siendo abiertos. Nadie tiene la verdad".
Le encanta el contacto con sus clientes, muchos de los cuales se refieren a Fabrice como su "estrella de la suerte". A su vez, cree que "en nuestro negocio, el destino desempeña realmente un papel. Dicta cuándo creamos algo nuevo y tiene un papel en nuestro timing, ya sea demasiado pronto, demasiado tarde o en el momento justo".