La salud mental como derecho humano: Descubrir el potencial terapéutico de los cannabinoides

Resumen

• Este Día Mundial de la Salud Mental 2023 (10^th de octubre), el mundo se centra en "La salud mental es un derecho humano universal" - porque aunque las necesidades de salud mental son elevadas en todo el mundo¹, las soluciones para abordarla son limitadas y en gran medida inadecuadas.
• La industria farmacéutica tiene una gran responsabilidad en el apoyo al bienestar mental de las personas, explorando continuamente nuevas vías que inspiren y guíen el desarrollo de terapias eficaces y específicas y, en última instancia, ofreciendo más opciones de tratamiento y comodidad a los pacientes.
• Un campo de investigación apasionante es el cannabidiol, que se muestra prometedor como candidato eficaz y seguro para ayudar a tratar dolencias de salud mental. Siga leyendo para descubrir cómo dsm-firmenich impulsa los avances en este ámbito para hacer realidad el progreso y facilitar el acceso a una mejor salud mental en todo el mundo.

Datos sobre salud mental

El Día Mundial de la Salud Mental 2023 se celebra este año el 10 de octubre, y ofrece la oportunidad de concienciar sobre la importancia de la salud mental, así como de compartir nuevas investigaciones, avances y soluciones de vanguardia en este ámbito. El tema de este año es "La salud mental es un derecho humano universal ", que subraya el derecho de todos, en todas partes, a poder acceder al asesoramiento y apoyo que necesitan para gestionar y mejorar su bienestar mental.  

Durante la pandemia de COVID-19 todos fuimos cada vez más conscientes de la necesidad de centrarnos en nuestra salud mental y mantener el equilibrio. También vimos en nuestro día a día lo común que es enfrentarse a luchas emocionales y mentales, a menudo sin decir nada a nuestro entorno. Los trastornos mentales representan una importante carga para la salud pública en todo el mundo debido a su prevalencia, su carácter restrictivo y su gran repercusión en la calidad de vida. Tim Mak, científico principal de dsm-firmenich, explica: . "Abordar la salud mental se ha convertido en una prioridad para las personas, las comunidades y los sistemas sanitarios de todo el mundo. El malestar mental no ha dejado de aumentar en la última década y, en la actualidad, una de cada ocho personas vive con un trastorno mental.² La ansiedad y la depresión son los más comunes entre ellos y pueden afectar significativamente a la calidad de vida. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que el 4% de la población mundial padece depresión y, de esta cifra, hasta el 75% de las personas de los países de ingresos bajos y medios no recibe ningún tipo de tratamiento.³ Del mismo modo, los trastornos relacionados con la ansiedad afectan a una gran proporción de la población adulta: hasta el 10%.⁴" 

Entre los obstáculos a un apoyo eficaz figuran la falta de inversión en educación y atención en salud mental, la escasa formación de los profesionales sanitarios y un persistente estigma social asociado a los trastornos mentales que impide a las personas pedir ayuda. Tim Mak describe que, además de estas barreras, existen otros retos. "Actualmente disponemos de una amplia variedad de tratamientos para estas patologías, pero, por desgracia, no son eficaces para todos los pacientes y pueden tener una serie de efectos secundarios desagradables. Teniendo esto en cuenta, existe una necesidad acuciante de tratamientos novedosos que gestionen de forma segura y eficaz los trastornos mentales sin causar efectos secundarios adversos. Aquí es donde los cannabinoides podrían ser una prometedora vía de innovación".

El cannabidiol, pionero en una nueva era de la salud mental

Los cannabinoides interactúan con el sistema endocannabinoide (SCE) del organismo, que regula una amplia gama de funciones corporales, como la respuesta al estrés y el estado de ánimo. Esto convierte a los cannabinoides, entre los que el cannabidiol desempeña un papel primordial, en candidatos prometedores para los numerosos estudios en curso en el campo de la salud mental, incluidos los relacionados con la ansiedad y la depresión.

En los últimos años, ha aumentado la investigación sobre el papel de los cannabinoides en la salud mental en entornos clínicos. Por ejemplo, una revisión publicada en 2022 reveló que el CBD puede tratar eficazmente la ansiedad y la depresión, así como otras complicaciones neurológicas.⁵ Otro estudio publicado en 2021 demostró que el CBD era eficaz para reducir la respuesta al estrés -incluidas las respuestas fisiológicas al estrés, como el aumento de la frecuencia cardíaca y los niveles de cortisol- y que no era inferior a los comparadores farmacéuticos.⁶ Mientras que otro grupo de investigación demostró el efecto calmante del CBD sobre el sistema nervioso central y la reducción asociada de la ansiedad, destacando su potencial en los trastornos relacionados con la ansiedad.⁷

En un reciente seminario web en colaboración con Manufacturing Chemist, en el que participó el profesor José Alexandre de Souza Crippa, del Departamento de Neurociencias y Comportamiento de la Universidad de São Paulo (Brasil), dsm-firmenich analizó los últimos avances científicos y las prometedoras investigaciones sobre si los cannabinoides podrían ser una terapia potencial para el tratamiento de trastornos mentales. Uno de los temas abordados durante la sesión fue el agotamiento. La conversación reveló que el CBD ha demostrado reducir los síntomas del agotamiento en sólo 30 días y, lo que es aún más interesante, cuando los individuos dejaron de tomar la medicación, se descubrió que los efectos protectores habían durado otros 60 días.⁸

Soluciones especializadas para el desarrollo de cannabinoides en un mercado en expansión

Esta prometedora evidencia científica es una de las razones por las que los cannabinoides son uno de los campos farmacéuticos con mayor crecimiento previsto. Actualmente hay más de 200 ensayos activos con cannabinoides para explorar el papel de estas moléculas únicas en la salud mental y otras áreas terapéuticas. Y no hay indicios de que la innovación se ralentice. En 2021, el mercado mundial de cannabinoides estaba valorado en 22.100 millones de dólares y se prevé que crezca hasta 154.000 millones a finales de 2031, lo que significa una importante expansión del mercado.⁹ Además de esto, los organismos reguladores mundiales siguen tomando medidas para mejorar el acceso a los medicamentos basados en cannabinoides, y cada vez hay más familiaridad y aceptación del cannabis medicinal como vía de tratamiento. 

Teniendo en cuenta todos estos factores, existe una clara oportunidad para que los cannabinoides formen parte de un debate más amplio en torno a las terapias globales de salud mental, y la industria farmacéutica tiene un gran papel que desempeñar en este sentido. Para ayudar a los desarrolladores de fármacos a entrar en este mercado emergente, dsm-firmenich -junto con su socio estratégico Brains Bioceutical- ha creado una plataforma de innovación para facilitar el desarrollo de fármacos basados en cannabinoides en las primeras fases y apoyar a los clientes a lo largo de todo el proceso de desarrollo del fármaco. Nuestra amplia oferta incluye una sólida cartera de API cannabinoides que están preparados para los ensayos, marcan el listón de la calidad y también están disponibles en forma farmacéutica acabada. Además, contamos con una rica cartera de cannabinoides menores (actualmente en desarrollo). Nuestro principal objetivo se centra en profundizar en las capacidades científicas de los cannabinoides en aplicaciones que incluyen el alivio del dolor, la reducción del estrés, la gestión de la ansiedad y mucho más.