"Me entusiasma lo que puedo hacer por los estados emocionales de los seres humanos, y por el bienestar de nuestro planeta, a través de mis diseños de perfumería."
Pocos estadounidenses -y aún menos mujeres- han dejado su huella en el mundo de los perfumes, dominado por los europeos. Nicole Mancini destaca como fuerza transformadora. Como perfumista principal en Nueva York, aporta una perspectiva claramente estadounidense que combina la precisión científica con la narración emocional.
Las primeras influencias moldearon el espíritu pionero de Nicole. Criada por una madre soltera que desafió las expectativas al ser la primera mujer agente de bolsa de su empresa, Nicole heredó una mentalidad pionera. El afán emprendedor de su padre alimentó aún más su audacia, llevándola finalmente a la perfumería, una carrera imprevista que abrazó con la intrepidez que la caracteriza y que no tardó en dominar.
Su viaje comenzó por casualidad mientras trabajaba temporalmente en una casa de perfumes. Cautivada por el poder invisible de los aromas para evocar emociones, activar la memoria y transformar el espacio, supo que había encontrado su vocación. Tras licenciarse cum laude en psicología y bioquímica, obtuvo una codiciada plaza en la prestigiosa Escuela de Perfumería Givaudan de Francia, donde perfeccionó su perspectiva y perfeccionó su oficio. Primero dominó las técnicas de creación de fragancias en productos de consumo, sobre todo en marcas de cuidado del aire y cuidado personal. Esta experiencia sentó las bases de su transición a la perfumería fina, centrándose en marcas de diseño, de famosos y especializadas.
Nicole se desenvuelve con soltura en el ámbito de las experiencias con fragancias finas, abordando la creación de aromas como una forma de arte multisensorial. Su experiencia abarca toda la gama de aplicaciones de las fragancias: desde que era niña, entiende perfectamente el poder de los aromas para crear una sensación de hogar. Esta experiencia la impulsa a crear fragancias que anclan a las personas en su entorno, evocan recuerdos entrañables y fomentan un profundo sentimiento de pertenencia. Tanto si diseña un perfume de autor como si elabora fragancias ambientales, ve cada creación como parte de una narrativa sensorial más amplia que mejora la vida cotidiana.
En la intersección de la psicología, el diseño y la percepción sensorial se encuentra su particular enfoque de la perfumería. Basándose en su apreciación de toda la vida de las artes visuales, la arquitectura y el diseño, crea composiciones olfativas tan cuidadosamente construidas como un espacio bien diseñado. Su amplia perspectiva creativa enriquece su capacidad para traducir las visiones de los clientes en experiencias sensoriales transformadoras.
En la actualidad, Nicole compagina su papel de esposa y madre de dos hijos con su próspera carrera profesional. Estas lecciones fundamentales siguen dando forma a su innovador enfoque de la creación de fragancias. A través de su arte, supera los límites y crea composiciones que mejoran el bienestar, inspiran la conexión y elevan las experiencias cotidianas. Su impacto va más allá de las creaciones individuales. Está forjando activamente el futuro de una industria en evolución y allanando el camino para que la próxima generación de perfumistas estadounidenses rompa barreras y prospere.