Daphné sabía desde los 10 años que estaba destinada a ser perfumista y nada la ha desviado de este camino. Apasionada del mundo de las fragancias, coleccionaba frascos y anuncios, siempre en busca de aromas.

Le encanta desplegar sus alas. Después de experimentar por primera vez el placer de volar en parapente, se aficionó al kitesurf. Encantada por el poder del viento, es una aventurera moderna que explora el cielo y el mar.

Como perfumista, Daphné es también un espíritu libre, que viaja por el mundo,  de las montañas a los desiertos. Pasó un año sabático recorriendo continentes para explorar la naturaleza, la espiritualidad y el arte contemporáneo.

Por el camino meditó en Nepal, trabajó en una granja ecológica en Japón, dominó el ayurveda en la India y estudió la lengua nativa en Italia, donde también pasó un tiempo en la Fábrica y la Bienal de Arte Contemporáneo de Venecia.

En la vida y en sus creaciones, Daphné peca de exceso racional y no desea cambiar de aires. Siente curiosidad por el mundo que la rodea, con un apetito constante por aprender. Quiere experimentarlo todo. Sus composiciones se benefician de este enfoque y su perfumería la refleja exactamente: espontánea, audaz y libre.