Nutrición y Salud Animal
La demanda de proteína animal sigue aumentando a medida que la población mundial crece.
El World Resources Institute prevé un crecimiento de 445 millones de toneladas anuales en 2050, para satisfacer las necesidades de una población de 9700 millones. De acuerdo con las cifras publicadas por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), esto significa un crecimiento de aproximadamente un 70 % en comparación con la actualidad. Sin embargo, la población mundial sólo aumentará un 40 % durante este período.
Este crecimiento en la producción animal representa una demanda tremenda en los recursos naturales del mundo. La industria debe, por lo tanto, tornarse más eficiente, usar menos tierra y reducir su huella ambiental.
Las enzimas nutricionales son una tecnología establecida y en evolución que brindan los medios medibles y tangibles para alcanzar estos objetivos.
Las enzimas nutricionales mejoran la digestibilidad de los ingredientes del alimento. Reducen sustancialmente la cantidad de alimento necesario para cubrir la creciente demanda de proteína animal a nivel mundial. También permiten un mayor uso de ingredientes y subproductos locales alternativos para alimentación animal reduciendo así nuestra dependencia en la soya y otros cultivos principales.
Basándose en 20 años de experiencia pionera en el desarrollo de enzimas y en la nutrición y salud animal, la Alianza dsm-firmenich-Novozymes ofrece soluciones únicas de enzimas nutricionales como la fitasa, carbohidrasa, proteasa y enzimas para la salud intestinal.
Gracias a la innovación de la primera proteasa nutricional del mundo y a las nuevas enzimas que degradan otros substratos presentes en el intestino, se ha conseguido mejorar la digestibilidad y la absorción de nutrientes del alimento animal. Esto llevó a mejoras importantes en el uso eficiente de los recursos naturales, ayudando a reducir la presión en el uso de la tierra para la producción de cultivos, reduciendo nuestra dependencia en los recursos finitos de fosfato rocoso a la vez que se ayuda al mayor uso circular de los subproductos. Nuestras tecnologías han llevado a lo siguiente:
